Si eres un profesionista que quiere tener éxito en su trabajo te cuento los cincos secretos que desde mi punto de vista necesitas para mejorar radicalmente. Se trata de cuestiones que nadie me dijo y que deduje con la experiencia.
Primero dime qué quieres lograr
Quiero dejar bien en claro para quien es está información, ya que no me gustaría hacerte perder el tiempo leyendo algo que no puedas aplicar. En este sentido te puedo decir que escribí esto para aquel profesionista que trabaja en una empresa, que está convencido de estar ahí, que quiere mejorar de forma radical y que tiene plenas intenciones de escalar en la pirámide laboral a un ritmo elevado.
En otras palabras, estas claves son para quienes quieren hacer carrera laboral en empresas de su sector, pero que estén buscando la forma de ascender a mayor velocidad. Si eres un emprendedor o si trabajas en una empresa, pero quieres dejarla lo más rápido posible para poner un negocio propio, entonces esto no es para ti, ya analizaré tu caso en otro documento, cierra esto y ponte a hacer otra cosa.
Me interesan los profesionistas que quieren hacer carrera empresarial porque noto que existe una frustración generalizada, la cual puedo resumir de la siguiente manera: “llevo tantos años en mi empresa, pero no puedo subir, ya que los buenos puestos se los dan a quien no los merece o abren la vacante para externos porque dicen que no hay quien la cubra internamente”. ¿Te ha pasado?
Si ya estamos claros con lo que quieres lograr, entonces adelante, aquí te van mis 5 secretos para que no te quedes estancado en el mismo puesto un año tras otro. Un punto más a considerar: estos secretos solo funcionan si los aplicas y si realmente crees en lo más profundo de tu ser que tienes lo que se necesita para subir en la pirámide laboral. Si sufres del síndrome del impostor primero supéralo.
Secreto 1. Haz que te importen las personas
En una empresa es fácil olvidar que las personas son lo más importante, la base de todo. Comenzamos a sumergirnos en proyectos, pendientes, reportes y juntas, al grado de que cortamos la interacción con otros para tratar de “ganar algo más de tiempo”. Y debo decirte que este es un gran error cometido con frecuencia.
Sé por experiencia que muchas veces “vamos a mil por hora” con tal de cumplir con todos nuestros pendientes. Es normal y no eres el primero al que le sucede. Pero yo quiero convencerte de que a pesar de todo nunca te olvides de los demás.
Puedes ser el mejor en lo que haces, pero si tus compañeros de trabajo no te tienen en buen concepto, se te dificultará mucho el camino hacia la cima laboral, e inclusive es altamente probable que ni siquiera puedas llegar. Esto porque en lugar de propiciar que los demás te impulsen, lo que harán será sujetarte para que no subas.
Son muchas ocasiones en las que he visto como alguien con una carrera prometedora en su empresa echa sus posibilidades por la borda al enemistarse con todo el mundo, no en sentido negativo, sino por no saber como destacar.
Te puedo contar mucho al respecto, pero te lo voy a resumir de la siguiente manera: nunca destaques a costa de tus compañeros, mejor reparte el crédito y gánatelos, que después ellos te ayudarán a escalar de posición.
Conviértete en un especialista en personas, observa sus comportamientos y reacciones, así las entenderás poco a poco, lo que te será muy útil siempre.
Secreto 2. Los resultados son tu nave hacia el éxito
Si aún no te has dado cuenta, pasas mucho tiempo de tu jornada laboral “apagando fuegos”, pendientes que tú o alguien no comentaron o no solucionaron a su debido momento y que ahora constituyen un problema. Y déjame decirte que mientras hagas lo urgente en lugar de lo importante no obtendrás los resultados deseados.
Esto debe de preocuparte, porque al final de cuentas, si no generas los resultados necesarios entonces no estás cumpliendo con tu empresa, lo que se traduce en que no destaques y entonces tus oportunidades desaparecen.
Aunque suene ilógico, te puedo asegurar que la gran mayoría de colaboradores en empresas no entregan todos los resultados que se esperan de ellos, es decir, no dan el 100%. Esto básicamente quiere decir que quien sí lo hace destaca fácilmente. Y tú lo que necesitas es destacar para poder obtener un mejor puesto.
Ojo, no se trata de señalar los errores y las faltas de los demás, pues dejándolos en evidencia romperás el Secreto 1. Lo que te recomiendo es que tus resultados hablen por ti, sin necesidad de que te la pases presumiendo lo que has logrado.
Y para generar resultados hay que entrar al terreno de la gestión personal, lo que no es difícil, pero requiere esfuerzo. Sobre este tema te tengo un resumen: tú sabes lo que tienes que hacer, hazlo de una vez y deja lo que no es importante.
Conviértete en un “terminator”, más que empezar preocúpate por cerrar pendientes, pronto serás considerado como “el productivo”, lo que indica que estás generando resultados.
Secreto 3. No seas el eslabón más débil de tu equipo
Te lo diré claro: un equipo es tan bueno como su elemento más débil. ¿Suena duro, verdad? Sí, porque es una verdad dura de aceptar y porque quiero que te quede bien grabado que los eslabones más débiles de una cadena son los que permiten que esta se rompa cuando se aplica algo de presión extra, y esos son prescindibles.
Ahora bien, voy a matizar un poco: el miembro más débil del equipo no es necesariamente el más novato ni el que menos sabe. Así que no vayas a creer que estas a salvo, pues si tú eres el que menos aporta entonces estás en problemas.
He sido testigo en muchas ocasiones que la persona que menos aporta a su equipo suele ser aquella que solo está preocupada “por terminar lo suyo”. Esta actitud de egoísmo resulta especialmente dañina en equipos de trabajo con exceso de trabajo. No te digo que hagas el trabajo de los demás, pero un poco de apoyo siempre se agradece.
Ahora bien, considera que, por muy bueno que seas, sino encajas en tu equipo de trabajo, automáticamente te vuelves el elemento más débil. Porque necesitas aceptar que cuando no perteneces a un sitio lo mejor es buscar tu verdadero lugar.
Evita este problema adaptándote, poniendo de tu parte. Por favor, olvida el “yo soy de esta manera y no voy a cambiar”. Profesionistas con este tipo de pensamiento están destinados al fracaso, porque quien no cambia se queda obsoleto.
Vuélvete flexible, determina que necesita tu equipo y busca como aportarlo, pronto te convertirás en un eslabón resistente, siendo no descartable.
Secreto 4. Nunca desperdicies una reunión de trabajo
La mayoría de las empresas actuales están inmersas en un problema grave de “reunionitis”, un padecimiento que a simple vista no presenta mayores complicaciones, pero que en realidad afecta a toda la salud de la empresa. Sin embargo, tú puedes aprovechar cada junta de trabajo para brillar como un diamante. Sácale provecho a la situación.
Sé que tener reuniones improductivas de forma constante afecta mucho el estado de ánimo, pero si le das la vuelta al asunto te darás cuenta de que no es tan difícil destacar en las reuniones de trabajo. En especial porque nadie quiere hacerlo.
Ojo, no se trata de que te adueñes de la reunión y te la pases hablando sin mucho sentido, pues esto genera el efecto contrario: comienzas a destacar ante los ojos de los demás, pero de una manera poco positiva. Yo te hablo de que seas un estratega en cada junta laboral, participando cuando aportes algo a la discusión.
Nunca esperes al final para hablar, siempre hazlo en la primera mitad para evitar que la junta se alargue por tu culpa. También evita repetir lo que otros ya dijeron, aunque quieras dejar claras las cosas, confía en la comprensión de tus compañeros.
Además, en general es mejor cantidad que calidad, es decir, tiene más peso un par comentarios con fuerza y sustento, que muchos comentarios sin ningún sentido. Sé un estratega y define los momentos adecuados para participar.
Vuélvete un estratega, visualiza cada reunión laboral como un tablero de ajedrez, mueve tus fichas con inteligencia y aprovecha cada reunión laboral que tengas.
Secreto 5. RH es el mejor aliado que tienes ahora
Este último punto es un secreto que quiero mantener entre tú y yo. Se trata de una clave que nadie me contó nunca y que experimenté en primera persona. Y aunque debes tener mucho cuidado (ahorita te diré porqué), lo cierto es que el personal de recursos humanos es un aliado que pocos aprovechan al máximo.
Es muy común que los colaboradores de una empresa no quieren saber de los representantes de recursos humanos, ya que suelen verlos cuando como los ejecutores de las reglas y los lineamientos. Pero son personas clave en la organización.
Ahora bien, me refiero a que no forjes una relación con tu representante más cercano de recursos humanos basada en la mera conveniencia, sino a que realmente establezcas una relación de confianza mutua que les permita a ambos mejorar de forma sustancial. Porque créeme, RH puede ser un gran guía cuando te sientas perdido.
Debes tener cuidado porque si tus compañeros consideran que pasas demasiado tiempo con recursos humanos (aunque no sea así), podrían considerarte como un espía, momento en el cual perderás la confianza de todos.
Y es que dentro de la empresa no hay nadie mejor para decirte cómo eres percibido, si estás listo o no para otro puesto, o qué puntos te faltan mejorar. Si RH es quien tiene las respuestas, entonces qué esperas para ir a hacerle las preguntas.
Conviértete en un cuestionador razonable, porque para obtener respuestas claras tienes que hacer las preguntas correctas, en especial a tu jefe y a recursos humanos.
Es hora de ser muy disruptivo
Estos 5 secretos que te he contado son el camino para que mejores radicalmente tu carrera profesional y obtengas el éxito que siempre has deseado. Eso sí, llevarlos a la práctica requiere de un proceso, por lo que no verás resultados inmediatos. Te lo repito: no se trata de trucos que te harán la vida más fácil, sino de consejos que aplicados de forma constante te permitirán ascender en el escalafón laboral.
¿Cómo puedo estar tan seguro? Es muy sencillo, la mayoría de los profesionistas que trabajan para una empresa no se enfocan en estos puntos, ya que están muy ocupados “haciendo lo que les dicen” y “cuidando su lugar”. Es decir, si haces lo que el 90% de los profesionistas no hacen, entonces tendrás las oportunidades que el 10% si tiene. Ahora queda en ti aplicar estos secretos.
Eso sí, recuerda que lo más importante es ser auténtico en todo momento, pues crear una imagen profesional basada en mentiras siempre será una carga tan pesada que en algún momento ya no podrás sostenerla. No hay nada mejor que ser uno mismo, buscando siempre la mejora continua, claro está. Porque si no estás dispuesto a superarte entonces deja que alguien más lo haga, no estorbes a otros.
¿No sabes cómo establecer tu proceso de mejora continua? Escríbeme un correo electrónico, cuéntame tu situación actual y con mucho gusto te ayudaré a convertirte en un profesional que destaque. Créeme, no es algo imposible, aunque si te digo de una vez que tendrás que poner todo de tu parte para lograrlo, porque yo lo único que hago son las preguntas correctas, las respuestas tú las das.
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